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El león es uno de los depredadores más peligrosos del mundo, pero al conocer a su pequeño por primera vez, este feroz felino parecía tan tierno como un gato.
Cuando los críos alcanzan las siete semanas de nacidos, las leonas deciden que están lo suficientemente maduros para conocer al resto de la manada, incluyendo a sus padres.
El encuentro fue fotografiado por el lente de Suzi Eszterhas en la Reserva Nacional Masai Mara de Kenya, quien pasó meses estudiando la vida de los leones en el lugar.
Eszterhas aseguró que la protectora mamá leona estuvo siempre cerca para evitar que el macho fuese muy rudo en su primer encuentro con su crío.
Al principio el pequeño se veía un poco nervioso mientras se acercaba cautelosamente a su padre, pero luego comenzaron a jugar cariñosamente.
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